Zorgo es un villano entrañable a la par que cabroncete. Luis Bustos (Madrid, 1973) ideó este personaje para la desaparecida revista Mister K, un intento de ‘spin-off’ de El Jueves para la chavalería que apenas aguantó de 2004 a 2006 en los kioskos. En ese tiempo, por sus páginas se corrió sus aventuras este malo con cuerpo de pera, un archienemigo de la democracia que combate las fuerzas del bien con sus «tochobots». Una sucesión de alocadas historietas que dio lugar a dos álbumes, ahora recopilados en un volumen integral por Dibbuks, y que su autor trae bajo el brazo, junto a su novela gráfica ‘Endurance‘, al XII Salón del Cómic de Zaragoza.
A vista de niño, ‘Las aventuras de Zorgo‘ son divertidas, como no puede ser de otra manera cuando el protagonista es un malvado científico loco, con un esbirro simplón llamado Manolito. Si encima la mayor afición de Zorgo es destruir ciudades con los enormes ‘tochobots’, el tebeo se convierte en toda una fiesta. Ya no digamos si los oponentes del protagonista son el presidente de los Estados Unidos -un mandatario más del estilo de Bush que de Obama- y los agentes clonados de la ONU. Un locurón que se lee además con agilidad, puesto que se compone de historietas de una página.
Claro que si nos ponemos las gafas de señor mayor, tras ‘Zorgo’ hay mucho más. Hay referencias a todos esos ‘mad doctors’ de las películas y los tebeos, con temas ‘clásicos’ como el Frankenstein, el transformador de materia, la isla-guarida, la malignidad oriental, las armas nucleares, los cerebros en frascos y, por supuesto, multitud de robots grandes que destruyen cosas. Luis Bustos recuerda aquí al ‘Topolino‘ de Alfons Figueras, ‘rara avis’ de Bruguera que se destacó por reaprovechar argumentos pulp de seriales y filmes olvidados. Claro está, ‘Zorgo’ no tira de referentes tan especializados, y por tanto, es más accesible y fácil de disfrutar en la actualidad que la obra del maestro Figueras.
Zorgo tiene ya unos añitos pero aguanta muy bien el tipo. El tipo-pera, claro. Visto con ojos de chaval, o con las dioptrías que da la edad, ‘Las aventuras de Zorgo’ es un tebeo apto para echarse unas risas a todas las edades. Lo dicho, un villano adorable.
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